Un total de 32 agricultores recibieron durante 25 horas lectivas los conocimientos necesarios para una correcta manipulación y distribución de los productos fitosanitarios con el objetivo de preservar la salud de las personas, el medio ambiente y prevenir riesgos laborales, así como para cumplir con la normativa sectorial al respecto.
Esta formación por parte de entidades homologadas, como es el caso de ASAJA, es necesaria para que la Junta de Castilla y León expida el carné que han de exhibir cada uno de los usuarios a la hora de adquirir los productos fitosanitarios en los almacenes especializados, así como para llevar a cabo las labores de aplicación. Aunque el cultivo predominante en la zona es el lúpulo, también necesitan el carné para el tratamiento de los productos de huerta, del maíz, los cereales, los frutales, y para la limpieza química de cauces de riego.
