APAG EXTREMADURA ASAJA exige al Grupo Popular en el Senado que rectifique su postura sobre la implantación de normas para obligar al uso de semillas certificadas en las explotaciones. Con esta posición, la senadora del PP por Cuenta, que ha presentado la iniciativa, se pone de parte de las grandes multinacionales del sector, única beneficiaria de la moción aprobada, e incumple su deber de velar por el interés común del sector.
El pasado 12 de noviembre, la senadora del Partido Popular por Cuenca, Marina Moya Moreno, defendió una moción en el Senado, instando al gobierno de España a que haga campaña a favor de la utilización de semilla certificada en la agricultura.
En la mencionada moción, la senadora Marina Moya – que más parece portavoz de las empresas certificadoras de semillas- utiliza argumentos como que el uso de semilla certificada multiplica por siete el rendimiento de las cosechas, como si por el simple uso de semilla certificada ya no afectasen la sequía, el exceso de lluvia, las plagas…
Otro de los argumentos que esgrime es que la diferencia del precio de una semilla reutilizada a una semilla certificada es insignificante. Este año el precio de un kilo de trigo reutilizado por el agricultor tiene de coste el precio del grano, que esta a 18 cts., mas el precio de limpiar y tratar con fungicida e insecticida 0,02 cts., lo que da un total de 20 cts., frente a los casi 60 cts. a los que esta vendiendo la industria el kilo de semilla certificada. No se entiende que una diferencia del triple de su valor, pueda parecer insignificante para la senadora Marina Moya.
Habla la senadora de los 5,5 millones de hectáreas que se siembran de cereales en España. Si esa cantidad de tierra se siembra con semilla reutilizada poniendo 210 Klgs/Ha, a 20 cts. el kilo, salen 231 millones de euros, pero si la semilla es certificada, los 210 Klgs/Ha por 5,5 millones de hectáreas y a 60 cts. que están vendiendo el kilo de semilla certificada, salen 693 millones de euros, que es mucho dinero y hace que entendamos que la Asociación de Semillas, presione para ganar tanto, lo que no se entiende es que la senadora Moya Moreno se preste a este juego, si no tiene nada que ganar.
La senadora Moya utiliza un lenguaje estudiado y premeditado, llama a la semilla reutilizada como “semilla clandestina” como si la semilla que el agricultor ha multiplicado en su propia explotación, procediese del mismísimo infierno, o quizás la llame así por que no tributa a la asociación de semillas.
El discurso de la senadora, nos resulta muy conocido, ya que utiliza los mismos argumentos que la asociación de semillas en los últimos años, sobre todo desde que el ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero le dio todo el poder a la Sociedad General de Autores, que tan lamentables episodios ha escrito en la reciente historia de España.
Por todo lo expuesto, pedimos la dimisión de la senadora Marina Moya, que se retire o anule la dichosa moción y que el Partido Popular rectifique al respecto.