La crisis de precios en el sector lácteo, acarreada desde hace cinco años, está pasando factura en forma de abandono a las explotaciones ganaderas de la provincia. En el sector de la leche de vacuno ASAJA estima que hay activas 545 explotaciones en la provincia y que ha caído el censo un 5,2% respecto al año anterior. En ovino de leche el promedio de explotaciones durante 2012 ha sido de 374, lo que representa un descenso del 5,5% respecto al año anterior. En caprino de leche, las explotaciones han pasado de 42 en el año 2011 a 39 en el 2012, lo que supone un descenso del 7 por ciento. Con estos datos que maneja ASAJA obtenidos de la Junta de Castilla y León y de la base de usuarios del Laboratorio Interprofesional Lácteo, en la provincia de León quedan 958 explotaciones lecheras para el conjunto de las tres especies que se ordeñan: vaca, oveja y cabra.
La crisis de precios en este sector, sin duda el que más dificultades está atravesando en el conjunto de la agricultura y ganadería provinciales, es la causante de un abandono de explotaciones en porcentajes preocupantes, y lo que es peor, no hay incorporación de jóvenes ni se están redimensionando el resto de explotaciones. Cuando los precios permitían un margen de beneficio, también había abandonos, pero se mantenía o aumentaba la producción debido a que otras granjas adquirían mayor dimensión, situación que desde hace cuatro o cinco años ya no se produce. Por lo tanto, ASAJA consta que se está produciendo una reducción en el número de granjas y una reducción en la carga ganadera y en el volumen de leche ordeñada. Paralelo a esto está paralizada la inversión en las explotaciones lecheras, con lo cual perderán competitividad a medio plazo, y se constata también una menor contratación de asalariados – el sector lácteo es el que tradicionalmente ha ocupado mayor número de mano de obra asalariada-.
León sigue siendo la principal provincia productora de leche de vaca en Castilla y León con algo menos de un tercio del total, es la tercera productora de leche de oveja detrás de Valladolid y Zamora y la segunda en producción de leche de cabra detrás de Ávila.
