El presidente de UAGN, Félix Bariáin, el secretario general del sindicato, David Lezáun, y el presidente de la Asociación de Regantes y Usuarios de Agua en Navarra (ARUNA), Salvador Fernández, han reclamado la construcción de la segunda fase del Canal de Navarra, y han pedido explicaciones al Gobierno foral. Bariáin ha dicho que "la sorpresa es mayúscula ante esta situación”, y ha advertido de que "las expectativas y el futuro de los agricultores se paralizan si se paraliza el Canal de Navarra, y hará inviables los regadíos de la primera fase".
“Estamos pagando a la Sociedad Canal de Navarra (Canasa) unos 80 euros por hectárea al año para pagar un préstamo de 125 millones a 30 años, y también le pagamos el consumo de agua, lo que suma un total de 200-250 euros al año por hectárea. Con la paralización los costes se duplicarán a 400 o 500 euros”.
Según ha explicado, "ha habido muchos agricultores que conociendo el trazado se han posicionado para estar en el Canal de Navarra, que han comprado fincas, que se han preparado para ser competitivos, y ahora se les está diciendo que se tienen que buscar la vida".
Por su parte David Lezáun ha subrayado que “la paralización afecta no solo a los agricultores, sino a la sociedad en general, ya que el proyecto crearía 7.000 puestos de trabajo, generaría el 6% de la energía que consumiría Navarra, el 70% del agua para abastecimiento, 250 millones en sector agroalimentario, etc.”.
El presidente de UAGN ha manifestado que si existe un problema de financiación, "Navarra cuenta con un Plan Moderna con 240 millones de euros". "Parece que este plan iba a ser la panacea, y ahora la primera en la frente. Si hay 240 millones, nosotros también queremos parte de ese dinero", ha recalcado.
Por todo ello ha reclamado a la presidenta del Gobierno de Navarra, Yolanda Barcina, y la consejera de Desarrollo Rural, Lourdes Goicoechea, que informen sobre cuál es la situación, y ha adelantado que pedirá "responsabilidades de todo tipo" si el Canal de Navarra se paraliza.