Las organizaciones vascas ENBA, FEDERACION DE COOPERATIVAS AGRARIAS DE EUSKADI, GRUPO PROÁFRICA, SERGAL, UNESCOETXEA y el Foro Rural Mundial han presentado esta mañana en el centro cultural Koldo Mitxelena de Donostia el Comité de Euskadi para la celebración del Año Internacional de la Agricultura Familiar 2014. El objetivo de este nuevo punto de encuentro será “impulsar el reconocimiento de nuestros agricultores, agricultoras y baserritarras, así como del papel fundamental que desempeñan en nuestro territorio”. El Comité AIAF-2014 está abierto a la participación de otros agentes del sector y se trata de una iniciativa que cuenta con el apoyo del Gobierno Vasco.
Mikel Mancisidor, director de Unesco Etxea; JoxeMari Zeberio, secretario ejecutivo del Foro Rural Mundial; Xabier Iraola, coordinador de la organización agraria ENBA; y Belen Balerdi, gerente del centro de gestión SERGAL, presentaron esta iniciativa en una rueda de prensa.
La asociación para el desarrollo Foro Rural Mundial (FRM), con sede en Vitoria-Gasteiz, ha sido precisamente el impulsor mundial del Año Internacional de la Agricultura Familiar 2014, el primer Año Internacional aprobado por las Naciones Unidas que ha estado precedido por una campaña global de la sociedad civil. Este acontecimiento mundial supone una oportunidad única para impulsar políticas públicas a favor del desarrollo de la Agricultura Familiar, cuyo papel y potencial como garante de la seguridad alimentaria y del desarrollo rural no es suficientemente reconocido.
Con la creación del Comité AIAF-2014 de Euskadi, esta celebración también llega al País Vasco. Las organizaciones impulsoras de esta iniciativa organizarán distintas actividades durante 2014 con el objeto de solicitar a las instituciones nuevas políticas que impulsen el sector y respalden la labor de los baserritarras. Asimismo, llaman a la sociedad a apoyar con sus decisiones diarias la labor de los baserritarras como motores de la economía, el equilibrio territorial y la conservación del entorno natural.
La Agricultura Familiar, según la FAO –organización de la ONU para la alimentación de la agricultura–, es “una forma de organizar la producción agrícola y silvícola, así como la pesca, el pastoreo y la acuicultura, que es gestionada y dirigida por una familia y que en su mayor parte depende de mano de obra familiar, tanto de mujeres como de hombres. La familia y la explotación están vinculadas, co-evolucionan y combinan funciones económicas, ambientales, reproductivas, sociales y culturales”.
En Euskadi, prácticamente la totalidad de las explotaciones agrarias independientemente de su grado de tecnificación, intensificación, modernización, comparten un denominador común: son explotaciones familiares. Las explotaciones agrarias vascas, más allá de ser el principal motor económico del medio rural, son el elemento vertebrador del territorio tanto a nivel ambiental, como social. Prueba de ello es que gestionan el 85% de la superficie del territorio, estimándose que el 0,91% de la población activa se dedica al sector primario. En la CAPV existen aproximadamente 16.416 explotaciones activas. La dimensión media de la explotación en la CAPV varía mucho por Territorios, dadas las diferentes características orográficas y climáticas entre Álava (32 has), Bizkaia (10 has) y Gipuzkoa (16 has). Sólo el 10% de las explotaciones se gestionan por titulares menores de 40 años.