Por tanto, la lluvia de las últimas semanas no ha afectado a los naranjos sino que está siendo beneficiosa, no ha causado problemas y no ha tirado fruto al suelo como ha ocurrido en otras zonas como en Valencia, donde ha perjudicado a la mandarina. Una situación que, no obstante, ha beneficiado a la provincia de Córdoba al aumentar la demanda de la naranja de esta zona.
Muestra de ello es que las cooperativas valencianas, debido a que su fruto se ha deteriorado, están fijando dentro de su plan de compras a las naranjas del Valle del Guadalquivir, por lo que se espera que la campaña vaya mejorando en las próximas fechas a pesar de que actualmente aún hay poca fluidez de demanda en los mercados.
En cuanto a los precios, tras la última sesión de la Lonja de Cítricos celebrada ayer, estos son ligeramente superiores a los de la campaña pasada con una previsión de que la naranja tardía va a tener un precio interesante por la escasez de producción en esta variedad (lane y valencia late). En el caso de la naranja de industria, está tomando precio y a pesar de tener un rendimiento bajo, la cotización se prevé que siga subiendo en las próximas semanas hasta cerca de los 20 céntimos aproximadamente.
