Según explica Andreas Gattinger del FiBL "el resultado de un largo periodo, promedio de 14 años, fue significativo y consistente. Nuestros resultados demuestran que los suelos manejados de manera ecológico acumulan mayor cantidad de materia orgánica en el suelo y de esta manera atraen el dióxido de carbono de la atmósfera"
Concretamente este estudio fija en