Comenzó la campaña de la castaña, con la recolección de las variedades tempranas, “Portuguesa” en Igualeja y Cartajima, “Bravía temprana” de Jubrique y “Gallega” en Júzcar y otros municipios.
Estas suponen un % muy pequeño del total de la producción
En estos días ha finalizado la recolección de estas variedades precoces. El fruto tiene buena calidad, buen color, pero la producción es escasa. Dependiendo de la zona hay altibajos en los kilos recogidos, pero desgraciadamente estamos en un año malo.
En la zona de Jubrique la cosecha de castaña temprana ha sido escasa. Este calor de los últimos 10-15 días, está afectando muy negativamente a la recolección, el erizo está muy seco, en muchos casos no se cae, se queda en el árbol, hay que varearlo.
En la zona de Igualeja y Pujerra, de castaña temprana, se han cogido menos kilos de los previstos, el inicio de campaña parecía prometedor, a pesar de los calores, pero al final la climatología se ha impuesto. La recolección ha sido muy trabajosa, las altas temperaturas son el principal enemigo, el erizo pincha mucho.
Como bien saben y dicen los agricultores “dependemos del cielo”.
En el mes de septiembre, en donde más ha llovido, de Valle del Genal, solo se han recogido unos 5 litros/m2. Las altísimas temperaturas que hemos sufrido en agosto-septiembre no han ayudado al óptimo desarrollo del fruto.
En estos días, según la zona, comienza la cosecha-recogida de la principal variedad del Valle, “la pilonga “. Las previsiones de cosecha son malas, la recolección será muy trabajosa, los erizos están soleados, muy secos. Los arboles tienen muchos erizos “malucos” (vacíos) y además, los erizos que tienen castañas, tienen pocas.
Los castañeros miran al cielo, esperando que bajen las temperaturas y llueva algo, por lo menos para refrescar el árbol, los erizos y el terreno, facilitando la recolección.
Las 3.500 hectáreas de castaños producen en un año normal entre 3,5 y 4 millones de kilos de castañas. En este momento todavía es pronto para hacer una previsión, pero será un mal año.
Al hablar de castaña resulta inevitable hablar de la avispilla del castaño, una plaga que trae de cabeza a los agricultores de la zona. En la primavera pasada la administración ha realizado varias sueltas en el Valle, de un depredador natural, el Torymus, con el fin de controlar la plaga. A todas vistas en cantidad insuficiente como reconocen los implicados.
A día de hoy el Ministerio sigue sin autorizar la comercialización del depredador, para que el propio agricultor pueda tratar sus castaños. Esta demora en la contención de la plaga puede llegar a suponer una merma importante en la producción de castaña de los próximos años. Ver el caso de Italia.
Los agricultores de la zona están a la espera de que la Junta de Andalucía, publique las recomendaciones-instrucciones con las medidas culturales, de cultivo y tratamientos (suelta de Torymus) que deben seguir estos, en sus castaños para la propagación del depredador, contención de la plaga, y evitar que los castaños mueran.
Por si fuera poco, este año desde comienzo de la primavera en varias zonas del Valle del Genal, se ha producido la muerte de numerosos ejemplares de castaños, víctimas de una enfermedad que desde hace varios años viene asolando el castañar de la zona. Tenemos constancia de que varios de los afectados lo han comunicado a la Consejería, los agentes de medio ambiente han visitado las fincas. Estamos a la espera de que el departamento de sanidad vegetal identifique al patógeno causante y proponga medidas de contención-erradicación.
En nombre de los afectados, solicitamos se trate este asunto con diligencia y prioridad, para que dentro de varios años no nos encontremos zonas del valle del Genal en las cuales han desaparecido los castaños.
