La reunión celebrada esta el pasado viernes en Valencia entre el director general de Producciones y Mercados del Ministerio de Agricultura, Carlos Cabanas, y los representantes de las organizaciones agrarias sobre el desarrollo y aplicación de la futura Política Agraria Común (PAC) en el territorio español arrojó resultados decepcionantes para los intereses del campo valenciano, de acuerdo con la valoración al respecto que efectúa la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA).
A la decepción por los puntos de vista expuestos por el alto cargo del departamento agrario del Gobierno central se une una sensación de inquietud y alarma, puesto que si finalmente prosperan y se llevan a la práctica los criterios de reparto que pretende aplicar el Ministerio de Agricultura en materia de ayudas directas, el 30% de los agricultores valencianos quedarían fuera de la mismas. Efectivamente, el debate sobre este punto se centra en el importe mínimo a cobrar.. El Ministerio, tal como quedó patente en el encuentro del viernes pasado, defiende los 300 euros como cantidad mínima para poder cobrar la subvención, mientras que AVA-ASAJA considera que, teniendo en cuenta la realidad agraria de la Comunitat Valenciana, es absolutamente imprescindible que el acceso a esas ayudas incluya también a los agricultores que cobran 100 euros por hectárea, puesto que en caso contrario –es decir si finalmente prosperan las tesis del Gobierno central- el 30% de los agricultores valencianos no percibirían esas ayudas, tal como ya se apuntado.
“Para AVA.ASAJA es una línea roja que el Ministerio no puede traspasar bajo ningún concepto –apunta el vicepresidente tercero de AVA-ASAJA, Miguel Minguet, quien asistió al encuentro- porque hacerlo supondría marginar de manera gratuita e injusta a miles de productores valencianos. Quizá lo peor del caso es que ya partimos de una situación muy discriminatoria para nuestra agricultura, ya que el valor medio de la ayuda que percibe un agricultor valenciano es un 72% inferior a la media española. Por tanto, si el Ministerio aplica el criterio de los 300 euros ese desequilibrio en el reparto de los fondos de la PAC sería todavía más acusado”.
Miguel Minguet destaca que “en cualquier caso queda margen de maniobra para seguir negociando, pero reconoce que “la actitud percibida resulta inquietante porque en el Ministerio siguen pensando en términos de Levante feliz
Entre los aspectos positivos del encuentro destaca, no obstante, la buena predisposición mostrada por el director general de Producciones y Mercado del Ministerio, Carlos Cabanas, de incluir tanto el arroz como la ganadería en el sistema de pagos acoplados y de poner en marcha el régimen de pequeños agricultores, que es una opción potestativa de los estados miembro.
