El último suceso tuvo lugar el pasado viernes, 6 de noviembre. “Los buitres atacaron a una vaca que estaba pariendo y mataron al becerro y, de la vaca, se comieron toda la vulva”, asegura uno de los afectados; quien añade que han tenido que sacrificar la vida de la reproductora ya que “no se podía hacer nada por ella”.
Buitres y meloncillos
Cabe señalar que esta explotación ha sido objeto de los incesantes ataques de fauna salvaje, tanto de buitres como de meloncillos; éstos últimos provocaron la muerte de otro ternero y otra vaca en el mismo período de tiempo que lo hacían las rapaces. El saldo total, hasta la fecha, es de 3 terneros y dos vacas muertas (una sacrificada).
ASAJA Salamanca asevera que el daño que ocasionan los buitres a la ganadería es un problema muy grave y que la Administración regional debe hacerse cargo sin demora e implantar un sistema de compensación al ganadero igual que ocurre con el lobo. Además, y respecto a los daños provocados por los meloncillos, especie invasora del norte de África, ASAJA también solicita su control, ya que no es una especie cinegética.
Fuente: Asaja Salamanca
