Apenas faltan unos días para que la UE firme el nuevo acuerdo agrícola con Marruecos y Asaja Málaga no ceja en su empeño de frenar un acuerdo que dará al traste con gran parte de nuestras producciones. Resulta imposible competir cuando las reglas del juego son tan ventajosas para unos –los agricultores marroquíes- y tan perjudiciales para otros –los agricultores malagueños-.
Además de las cuestiones relacionadas con el dumping social, el Sahara y otras cuestiones no menos importantes, desde Asaja Málaga planteamos 10 cuestiones estrictamente técnicas y profesionales por las que pedimos encarecidamente un NO rotundo de los europarlamentarios europeos al nuevo acuerdo con Marruecos. Hasta Madrid se ha desplazado hoy Benjamín Faulí, técnico de Asaja Málaga y especialista en Frutas y Hortalizas, para defender la agricultura malagueña, quien ha participado en un encuentro con el eurodiputado José Bové, vicepresidente de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo, que como se recordará votó en contra del acuerdo al considerar que perjudicaba tanto a los agricultores europeos como marroquíes.
El decálogo de razones esgrimido por Asaja Málaga es el siguiente:
- En primer lugar el incumplimiento de los acuerdos anteriores y la pasividad de la Comisión. La OLAF (oficina de la Comisión que investiga los posibles fraudes) confirmó el fraude en su investigación número OF/2004/0105 relativa a “Posibles irregularidades en la importación en Francia de tomates de Marruecos”. Desde Asaja no nos creemos la “promesa” de la Comisión de que a partir de ahora su actuación va a ser diferente.
- Tomate: Hundimiento de las exportaciones españolas y sustitución de la producción, provocado por el envío indiscriminado de producto marroquí. El cumplimiento exhaustivo del nuevo acuerdo no modificaría la situación actual, porque de facto, ya se están exportando cifras muy superiores a las permitidas actualmente.
- Calabacín: Se premia el exceso. Se le concede un contingente de 50.000 toneladas a Marruecos, cuando el anterior era de 25.000 toneladas. En los últimos cinco años Marruecos nunca ha exportado menos de 40.000 toneladas anuales.
- Pepino: Contingente sobredimensionado. Se le concede un contingente de 15.000 toneladas, cuando nunca han exportado más de 6.000 toneladas anuales.
- Aguacate: No hay reciprocidad. Marruecos exporta sin ningún tipo de arancel mientras que el aguacate español se exporta con un arancel del 49%, y que se quedaría en un 42%.
- Fresón: Gravísima competencia. Solapamiento en abril y mayo e incremento del contingente de un 38%, de 12.000 a 16.600 toneladas.
- Naranja: Imposible competir: El precio de entrada, puesto en la UE es de 26 céntimos de € por Kg. Se les rebaja un 30%. Pueden enviar sin limitación.
- Clementina: Imposible competir. El precio de entrada, puesto en la UE es de 48 céntimos de € por Kg. Se les incrementa el contingente un 34,5% hasta 170.000 toneladas, y coincidiendo plenamente con nuestra campaña.
- Importación a la UE de productos agrícolas alejados de nuestros criterios de producción, como fitosanitarios prohibidos en la UE y aceptados en Marruecos.
- Competencia provocada por la propia Comisión Europea. Un ejemplo claro es el del olivar. La Unión Europea a través del programa de cooperación con Marruecos para el periodo 2011-2013, se ha comprometido a aportar al país magrebí más de 565 millones de euros en tres años. A estas cifras hay que sumar lo que la UE ya concedió en los últimos diez años a Marruecos, que suma 1.330 millones de euros en fondos de desarrollo. En 2010 la UE aprobó 70 millones de euros para el sector agrícola, específicamente para desarrollar el Plan Verde. Parte de esos fondos se destinan para instalar plantaciones de olivar, sector totalmente hundido en España.
