Además de las ayudas directas del FEAGA, se han solicitado las ayudas al desarrollo rural del FEADER, que en 2018 representaron 36,8 millones de euros, siendo la partida más importante las infraestructuras agrarias en concentraciones parcelarias y regadíos, seguida de la modernización de explotaciones e incorporación de jóvenes al sector, ayudas agroambientales, forestación, zonas de montaña, grupos de acción local y ceses anticipados. Los beneficiarios de estas ayudas FEADER han sido agricultores, propietarios de tierras no agricultores, propietarios forestales, y titulares de distintos negocios en el medio rural.
A falta de datos oficiales al cierre del plazo de solicitudes mañana viernes, ASAJA estima una reducción en el número de beneficiarios del orden del 3 por ciento, aunque es previsible que se mantengan las ayudas debido a que esa reducción de beneficiarios provoca un redimensionamiento de las explotaciones.
ASAJA de León, junto al resto de organizaciones agrarias y entidades financieras, es entidad colaboradora de la Junta de Castilla y León en la gestión de estas ayudas. ASAJA de León gestionó el pasado año el 32,5% de los expedientes y el 41,3% de todos los fondos que llegaron a la provincia de León, porcentajes que en ambos casos mejorarán también este año. ASAJA de León es la tercera entidad colaboradora, por importancia cuantitativa, de cuantas tiene la Junta de Castilla y León para la gestión de estas ayudas, por detrás de Caja Rural de Zamora y Caja Rural de Burgos.
Frente a lo llamativas que puedan parecer las ayudas al sector agroganadero de la provincia de Leon, ASAJA pone en valor la facturación de este sector primario que vende cada año productos agroganaderos no procesados por valor de 700 millones de euros, que realiza compras en medios de producción y servicios por valor de 400 millones de euros, y que destina a amortización de las inversiones 120 millones de euros.
