La Junta de Andalucía ha dejado a miles de agricultores y ganaderos granadinos sin cobrar una parte o la totalidad de los importes de las ayudas de PAC debido a ineficaz funcionamiento de la Delegación Provincial de Agricultura que desde hace dos años sufre una descentralización que afecta al personal y dificulta la resolución de los treinta mil expedientes que se presentan en nuestra provincia. La Administración autonómica ha retenido al menos el 40% de esos expedientes debido a incidencias relativas a cesiones de derechos o a controles de campo pendientes que no ha grabado a tiempo, echando por tierra todo el trabajo previo de las entidades colaboradoras desde el mes de junio.
Los beneficiarios de las ayudas que se quedaron sin cobrar ni siquiera han tenido constancia ni conocimiento por parte de la Administración autonómica de que su expediente estuviera afectado por incidencia alguna, hasta ahora que acaban de recibir el trámite de audiencia, con diez escasos días para alegar, dándonos pista real de la cantidad de afectados, alrededor de 12.000 (las entidades colaboradoras ya veíamos con preocupación lo que se avecinaba). Se trata de profesionales del campo que necesitaban liquidez para afrontar las inversiones de la nueva campaña que se han visto seriamente perjudicados al no recibir el dinero que esperaban precisamente en fechas claves para la siembra y la recolección.
Desde ASAJA GRANADA denunciamos que esta lentitud administrativa y esta deficiencia estructural en el organigrama de trabajo que aqueja al servicio de ayudas de nuestra provincia y reclamamos de la Consejería de Agricultura una inmediata solución. El campo ya tiene suficientes problemas con la reducción del apoyo presupuestario a la Agricultura (se ha recortado un 7,6% llegando a los niveles que teníamos en 2007) para añadirle además trabas administrativas de este tipo.