En ese ánimo de mantener las cámaras y los servicios que están prestando al sector, ASAJA ha hecho una propuesta de mínimos que espera sea asumida hoy por la Junta de Castilla y León. Por lo demás, ASAJA no ha variado su planteamiento de que sus representantes presenten dimisiones en bloque, a lo largo de la próxima semana, si hoy no se acuerda un plan de viabilidad económica para estas corporaciones de derecho público.
ASAJA ha rebajado sus pretensiones a un mínimo de 114.000 euros por cámara agraria, así como que la Junta asuma el desfase económico del presente año y los costes derivados de los despidos de los 31 empleados que el Gobierno regional considera que son prescindibles.
ASAJA de Castilla y León quiere salir al paso de declaraciones efectuadas por otras organizaciones agrarias y en particularmente de la UCCL, aclarándoles que no pueden asumir presidencias dejadas por ASAJA, pues las dimisiones únicamente se pueden suplir con miembros de la misma lista (véase Estatutos y Ley de Régimen General Electoral). Ante la dimisión de miembros de ASAJA, tanto donde se gobierna como donde no, y dado que las cámaras se quedarán con menos de 25 miembros en el pleno, la legalidad exige la constitución de una junta gestora que se haga cargo de las gestiones ordinarias hasta la celebración de nuevo proceso electoral. La OPA lamenta que otras organizaciones, en vez de sumarse a ASAJA para pedir medidas que garanticen la viabilidad de las cámaras agrarias, se hayan convertido en “palmeros” de la Junta en la aplicación de estos recortes presupuestarios y además se atribuyan un papel que no le han reconocido las urnas.
