- ASAJA CLM explica que, más que nunca, esta región necesita la unión de
todos - La organización agraria critica que se intente confundir a la opinión pública
en relación a las nuevas reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura
Toledo, 7 de mayo de 2025.– ASAJA Castilla-La Mancha ha criticado duramente que
se intente confundir a la opinión pública en relación a las nuevas reglas de
explotación del trasvase Tajo-Segura y que suponen una modificación de la
normativa que debería haberse hecho hace un año, tal y como se recoge en Real
Decreto 35/2023 de 24 de enero que incluía el nuevo Plan Hidrológico para la
cuenca del Tajo. Otra cosa, ha aclarado la organización, es la planificación
hidrológica de cuarto ciclo (periodo 2028-2033), cuyos documentos iniciales están
en fase de consulta pública y sobre los que habrá que estar vigilantes.
En este sentido se ha pronunciado el presidente de ASAJA Castilla-La Mancha, José
María Fresneda, quien ha lamentado que se aplique “la teoría de la confusión para
seguir manteniendo intereses políticos y económicos y perjudicar gravemente a los
agricultores. No se pueden hacer un totum revolutum con todo lo relacionado con
el agua”.
Las reglas vigentes del trasvase se diseñaron basándose en unas previsiones de
aportaciones hídricas que no se ajustan a la realidad desde hace más de cuarenta
años. “Es raro ver los embalses por encima del 40%, y cuando lo hacen, pronto
vuelven a bajar. La media cae por debajo del 30%. Se han rozado mínimos técnicos
de explotación” ha incidido Fresneda.
Esto ha generado un daño importante a la cuenca del Tajo en su conjunto y a los
municipios ribereños en particular. Un impacto ambiental, social y económico que
no se habría producido si realmente se hubieran trasvasado solo excedentes, como
marca la legislación.
Además, cabe recordar que la cuenca cedente es prioritaria y ello supone que debe
atender todas sus necesidades: consumo, caudales ecológicos, objetivos
ambientales… pero también las necesidades agrícolas, industriales e, incluso, los
aportes de agua a la cuenca del Guadiana a través de la Tubería Manchega, una
infraestructura para abastecer a una población objetivo de más de 300.000
personas que no tienen otra opción para este recurso.

Fresneda ha explicado que “es un sinsentido trasvasar agua del Tajo mientras se
precisan camiones cisterna para abastecer a los municipios ribereños de Entrepeñas
y Buendía. No se trata de garantizar el abastecimiento del Levante a cambio de
vaciar la cuenca del Tajo y obviar las graves consecuencias que ello conlleva. El
impacto ambiental, social y económico no se habría producido si realmente se
hubieran trasvasado solo excedentes, como marca la legislación”.
Por ello, ha lamentado que, “ahora que podemos ver una luz, se recurre
nuevamente al conflicto, y así nunca podremos llegar a ningún acuerdo. Enfrentar a
los regantes demuestra una gran irresponsabilidad, no se trata de una guerra del
agua, sino del cumplimiento de la legalidad vigente”.
En esta línea ha criticado que “es muy fácil tildar inmediatamente de insolidario a
quien se opone al trasvase sin recordar que la única opción de agua que tenemos en
Castilla-La Mancha es la del Tajo, mientras que en el Levante tiene otras
infraestructuras que hemos pagado entre todos los españoles, como son las
desaladoras”.
ASAJA CLM también ha recordado que el porcentaje de regadío en Castilla-La
Mancha en comparación con el de España es mínimo y, “de la misma manera que el
Levante quiere incrementarlo, nosotros también, pero se han paralizado los
regadíos porque no había agua en esta región”.
La organización agraria ha hecho un llamamiento al consenso global en torno al Tajo
y ha insistido en que no se permita que “los que buscan el enfrentamiento marquen
la hoja de ruta para la defensa de los agricultores, regantes o no regantes, de
Castilla-La Mancha. Esto va de resolver un problema gravísimo, no de hacer
política”, ha concluido Fresneda.
Fuente: ASAJA Castilla – La Mancha.