La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ávila ha exigido de nuevo a la Junta de Castilla y León y al Gobierno central que demuestren su compromiso con el sector y acometan de una vez por todas actuaciones eficaces para poner fin a la sangría que la acción de los lobos está provocando en la ganadería abulense. ASAJA de Ávila demanda un “punto y aparte” en la gestión de la especie, que proteja al ganadero y no única y exclusivamente al lobo.
Al respecto, el cabeza de ASAJA de Ávila a las elecciones agrarias del 2 de diciembre, Joaquín Antonio Pino, señaló que los continuos ataques a la cabaña ganadera ponen de manifiesto la “ineficacia” de las medidas puestas en marcha hasta el momento por la Administración regional en la gestión de la especie.
En este sentido, reclamó que la protección y el bienestar de los ganaderos sean el eje de todas las medidas relacionadas con el lobo, dado que el ganadero genera riqueza y actividad económica en el medio rural, cohesionando el territorio y frenando la despoblación de nuestros pueblos. “Sin ganadería el medio rural está abocado a la desaparición”, advierte.
Las propuestas de ASAJA para poner fin a la acción mortífera de los cánidos, que son la “puntilla” al sector de la ganadería extensiva en la provincia, sumida en una grave crisis por el desmesurado incremento de los costes de producción y el bajo precio al que venden su producción, se centran en controlar la expansión de la especie y el pago como daño patrimonial en lugar de a través de un inaceptable seguro que debe abonar el propio ganadero. ASAJA insiste en que es la Administración regional la que debe asumir, de una vez por todas, las indemnizaciones directas a los ganaderos.