ASAJA-Ávila participa en la jornada de lanzamiento del Grupo Operativo Supraautonómico de Tuberculosis Animal en Madrid
El presidente nacional de ASAJA, Pedro Barato, acompañado por la directora general de Desarrollo Rural y Política Forestal del Ministerio de Agricultura, Esperanza Orellana, reclamó en la inauguración de la jornada del grupo operativo ‘GOSTU’ la cooperación del Estado y las Comunidades Autónomas para lograr avances en sanidad animal. “Tenemos excelentes profesionales, por lo que no podemos matar las moscas a cañonazos. Es necesario una acción de Estado de la mano de las Comunidades Autónomas”, señaló.
“Ha sido una jornada en la que se están poniendo todos los esfuerzos para que la zona con problemas de interacción en la transmisión de tuberculosis y la fauna salvaje de El Barco de Ávila sea una de los territorios en los que se centren las miradas”, ha afirmado el presidente provincial, Joaquín Antonio Pino, quien ha recordado que precisamente esta comarca es una donde hay más problemas para avanzar en la lucha contra esta enfermedad.
“En El Barco de Ávila fue donde comenzó una labor callada de ASAJA-Ávila para ayudar a los ganaderos”, ha recordado Pino, antes de subrayar que fue allí donde “a la vanguardia de la actualidad del sector” realizaron una jornada el mes de junio para analizar el papel de la fauna salvaje en la tuberculosis.
Expertos acreditados en la materia del mundo científico, investigador y administraciones se dieron cita para poner sobre la mesa las diversas especies cinegéticas como elemento transmisor de la enfermedad de la tuberculosis a la ganadería. Los ganaderos presentes pudieron escuchar las posibilidades legales de reducción de poblaciones de jabalíes y otras especies cinegéticas vinculadas a la problemática de las enfermedades animales y las transmisibles al hombre, así como las posibilidades de mejora a través de la bioseguridad.
Fruto de las gestiones y jornadas realizadas por ASAJA en la comarca de El Barco de Ávila, expertos en la materia conocieron sobre el terreno a pie de explotación la realidad que padecen los ganaderos