En el contexto del 11th EPP European Congress of Young Farmers, celebrado en el Parlamento Europeo bajo el lema “Young farmers: Toward a prosperous future for farming in Europe #ReFarmEU”, se ha puesto de manifiesto con especial fuerza la contribución de los jóvenes agricultores y ganaderos españoles. El evento congregó a 540 jóvenes agricultores in situ y más de 1.000 participantes en línea, convirtiéndose en una plataforma sin precedentes para visibilizar proyectos innovadores y resilientes provenientes de toda Europa.
La apertura del congreso puso en evidencia una realidad preocupante: “La edad media del agricultor es de 57 años, y sólo el 12 % son menores de 40”. Estos datos fueron recordados por los eurodiputados Herbert Dorfmann, Jessika Van Leeuwen, Paulo do Nascimento Cabral y Carmen Crespo Díaz, que insistieron en la urgencia de activar un relevo generacional dentro del sector.
Como organizadoras fundadoras del congreso figuran la Confederação dos Agricultores de Portugal (CAP), la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA) y el grupo parlamentario European People’s Party Group (EPP). Esta alianza demuestra la convicción de que sólo con el impulso de la juventud podrá garantizarse un campo europeo competitivo, sostenible y lleno de oportunidades.
Participación española destacada
Una delegación española compuesta por más de veinte jóvenes agricultores y ganaderos, todos ellos participantes del certamen nacional de ASAJA, se desplazó a Bruselas para representar el compromiso, la innovación y el talento de la nueva generación del campo español. Entre ellos se encontraban nombres como Mónica Domínguez, ganadora de los Premios Nacionales Joven Agricultor 2025 de ASAJA, así como Nerea del Río, Lucía Ortiz Montes y Aarón Vallines Gutiérrez, finalistas reconocidos por sus proyectos de transformación digital, eficiencia energética y compromiso social.
La presencia de esta delegación cumple un doble objetivo: representar a España en el congreso europeo y poner rostro al magnífico trabajo que realizan los jóvenes agricultores y ganaderos españoles.
Proyectos e innovación premiados
Durante el congreso se otorgaron varios reconocimientos que merecen atención:
- Ryan Portelli (Malta) ganó por una plataforma digital de gestión agrícola en tiempo real.
- Aleš Čadež (Eslovenia) fue premiado por un proyecto de producción láctea resiliente al clima, con energías renovables.
- Joana Vacas Freixa (Portugal) recibió galardón por su iniciativa de restauración y gestión del ecosistema dehesa montado.
Estos ejemplos refuerzan la tesis de que el futuro del campo pasa por combinar tecnología, sostenibilidad y talento joven.
España al frente del relevo generacional
La participación española adquiere especial relevancia en este marco: la ganadora nacional ASAJA 2025, Mónica Domínguez (Valdefuentes de Sangusín, Salamanca), lidera un proyecto que integra ganadería extensiva, apicultura y agricultura sostenible, reconociendo que “una explotación tradicional puede convertirse en referente integral de sostenibilidad, innovación y compromiso social”.
Asimismo, los proyectos de Nerea del Río (Palencia) y el dúo Lucía Ortiz Montes / Aarón Vallines Gutiérrez (Cantabria) subrayan que los jóvenes españoles están a la vanguardia en digitalización y eficiencia energética del sector.
Un mensaje para la política agraria europea
La presencia y visibilidad de los jóvenes españoles en Bruselas no es anecdótica: refuerza un mensaje político clave. La agricultura europea necesita relevo, talento, inversiones y normas que permitan ejercer la actividad con futuro. España muestra que, cuando se crean condiciones, los jóvenes responden. Como subrayó el presidente de ASAJA, Pedro Barato, “si no hay rentabilidad, no habrá relevo; si no hay incentivos fiscales, acceso al agua y al crédito, no habrá futuro”.
Hacia adelante
Este congreso marca un hito. Pero también plantea un reto para las instituciones nacionales y europeas: traducir estas voces jóvenes en políticas concretas, apoyos reales y marcos regulatorios adecuados. La delegación española, con sus jóvenes innovadores, ha demostrado que no basta con reconocimiento: es necesario apostar por ellos con recursos, confianza y oportunidades.
En definitiva: el futuro del campo europeo pasa también por España, y nuestros jóvenes agricultores y ganaderos están preparados para asumirlo.




