A esto hay que añadir la incertidumbre en las fechas de suministro de los inputs y en la disponibilidad de los mismos.
Tanto el agricultor como el ganadero se enfrentan a un escenario de altos costes de producción, que deben adquirir y pagar, para producir unas cosechas o unos animales, de los que se desconoce tanto si tendrán una producción normal, como sí el precio de venta será suficiente para contrarrestar esos altos costes de producción.
Balance Agrario 2021