No sólo nos roban la aceituna y nos destrozan los olivos, sino que, además de amenazarnos, nos agreden físicamente, como ha pasado en Navalvillar de Pela y en Tierra de Barros, o como ha ocurrido recientemente en La Nava de Santiago, dónde un trabajador que realizaba labores de vigilancia fue agredido salvajemente por un grupo de 14 desalmados, al quién cortaron el paso cruzando una furgoneta en la carretera, para sacarle del coche y darle una paliza. Todo ello con la total impunidad que les ofrece la ineficacia de las diferentes administraciones, estatal, autonómica y local y algún que otro político que se quejaba de las actuaciones de las fuerzas de seguridad del Estado.
APAG EXTREMADURA ASAJA viene denunciando desde hace meses, en las diferentes reuniones mantenidas con el Gobierno Estatal y con la Junta de Extremadura, y a través de los medios de información, del aumento de los robos en el campo y su extrema virulencia, situación que ha llevado a los agricultores, a la necesidad de montar patrullas de vigilancia, y no sólo nocturnas, con el principal objetivo de evitar que nos roben y que encima nos agredan.
Pedimos por tanto, desde APAG EXTREMADURA ASAJA, que se acabe con la impunidad de la que gozan estos grupos organizados de ladrones, que se intensifiquen los controles de seguridad y vigilancia por parte de las fuerzas de seguridad, y que de una vez, nuestros políticos se pongan manos a la obra y den una solución definitiva al problema de los robos en el campo, o van a esperar a que ocurra una desgracia para ponerse a actuar.
Los agricultores no nos vamos a dejar de amedrentar por estas bandas organizadas de atracadores, y seguiremos patrullando nuestros campos, y denunciado ante la autoridad los hechos delictivos que se produzcan.
Desde APAG EXTREMADURA ASAJA, decimos basta ya!