Las campañas del níspero y la cereza de Alicante se saldan con un balance atípico y negativo por la confluencia de las adversidades climáticas y el aumento de costes ocasionados por el COVID-19
Alicante hace balance de las campañas del níspero de la Marina Baixa y de la cereza de la provincia en sus dos principales zonas productoras, la Montaña de Alicante y Villena, y concluye que para ambos cultivos ésta ha sido una temporada negativa y atípica marcada, por un lado, por elevadas mermas de producción como consecuencia de un tiempo inusual, con muchas lluvias en época de floración y elevadas temperaturas en el proceso de maduración; y, por otro, por un incremento en los costos de producción debidos al Covid-19, como la falta de mano de obra cualificada y el hándicap de los desplazamientos en vehículos a las explotaciones, que ha ocasionado un verdadero quebradero de cabeza y problemas de operatividad a los empresarios agrícolas.