abril 3, 2014

Según datos del Fondo español de Garantía Agraria (FEGA) las comunidades autónomas han declarado en la campaña 2013-2014 un total de 52,61 millones de hectolitros de vino y mosto, lo que supone un fuerte incremento de un 53,6 % respecto al ejercicio anterior, que se elaboraron un total de 34,24 millones de hectolitros.

El gasto en vino y espumosos en los hogares españoles fue de 1.038,37 millones de euros en 2013, según los datos del Panel de Consumo, lo que supone un 1,5 % del valor de la cesta de la compra en ese ejercicio, que en todos los productos superó los 69.225 millones de euros.

El Ministerio de Comercio de China anunció hoy el levantamiento de las investigaciones por posible competencia desleal contra vinos importados desde la Unión Europea (UE), una medida que es consecuencia directa del acuerdo alcanzado entre los productores chinos y los europeos la pasada semana. Se finaliza la investigación abierta por las autoridades chinas en julio de 2013 sobre las exportaciones de vino europeas.

Según los últimos datos de la Agencia Tributaria correspondientes al año 2013 se ha producido un buen crecimiento en términos de valor, aumentando un 6,5% hasta los 2.628 millones de euros, que suponen 161 millones más que los facturados en 2012 y 882 millones más que en 2009 cuando, tras la fuerte crisis mundial iniciada ese año, empezó la masiva y más reciente internacionalización del vino español.

La organización agraria ASAJA, rechaza frontalmente, al igual que el resto del sector vitivinícola español, un eventual impuesto al vino que propone el comité de expertos sobre fiscalidad que asesora al Gobierno -en un informe no vinculante-, por sus efectos negativos en economía y empleo. Incluso el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, aseguró en el Congreso que no le gusta el impuesto del vino, tras la propuesta de fijar un tipo muy reducido a esta bebida planteada en el informe de la comisión de expertos sobre la reforma fiscal. Así lo señaló Arias Cañete durante su intervención en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, en la que afirmó que defenderá que “no me gusta” el impuesto al vino.