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ASAJA Alicante informa que, tras dos años con poco rendimiento, los agricultores de Pego concluyen una campaña muy satisfactoria y dan un paso más hacia la recuperación de antiguas variedades.



ASAJA Alicante informa que el arroz de Alicante, cultivado en el parque natural Marjal de Pego-Oliva, ha incrementado la producción alrededor de un 50% respecto a la campaña anterior, obteniéndose una cosecha de gran calidad. Los motivos se deben al gran esfuerzo de los agricultores por “evitar” las malas hierbas implementando la siembra en seco y que, a su vez, la climatología ha frenado la expansión del hongo
Pyricularia oryzae, principal causante de los problemas de este cultivo en los últimos años, que afectan sobre todo a la variedad bomba. 
 

 

Tras observar lo que estaba ocurriendo, en esta campaña los agricultores pegolinos decidieron no sembrar el arroz en el campo inundado, como es habitual, sino directamente en tierra “seca”, que evidentemente contiene el agua suficiente por tratarse de un humedal. De esta manera, con la siembra en seco “han engañado” a las malas hierbas, evitando su expansión. Habitualmente estas suelen tener un crecimiento más rápido que el arroz, con lo cual consumen mayores recursos y disminuyen el espacio de crecimiento del cultivo. Gracias al empeño, dedicación y unión de los aproximadamente 200 agricultores minifundistas de arroz de Pego, el 75% de los terrenos donde se ha practicado la siembra en seco ha resultado un éxito.  

 

Recuperación de variedades 
El bombón en Pego, variedad que únicamente se cultiva en Alicante, supone ya el 10% del cultivo total, con tendencia a seguir creciendo por su excelente calidad y por ser más resistente a enfermedades como la Pyricularia. ASAJA Alicante reintrodujo en 2016 -junto a Pego Natura- esta variedad que antiguamente fue el arroz que los agricultores de la zona cultivaban para uso privado por sus mayores propiedades, hasta su desaparición a mediados de los años setenta, pues la alta división de la superficie agraria de los arrozales del Parque Natural hizo inviable la rentabilidad de unos cultivos destinados a satisfacer a una industria que demandaba arroces de gran productividad.  

 

Asimismo, la buena aceptación que está teniendo el bombón tras su recuperación ha animado a los agricultores a seguir experimentando para poder cultivar en el futuro una gama más amplia de variedades de arroz con el objetivo de estar preparados ante cualquier adversidad. De hecho, actualmente se están realizando ensayos para volver a sembrar algunas variedades antiguas, como por ejemplo “vialone”, “dellarole” y “francés”, explica Vicent Dominguís, responsable de la sectorial de arroz de ASAJA Alicante.  

 

La asociación agraria destaca que el arroz bombón tiene una clara viabilidad económica por la rentabilidad de este cultivo, por su calidad, su adaptación a un entorno natural en el que hacen falta menos tratamientos y por sus cualidades, que deberían situarlo en la cima del turismo gastronómico. 

 

Los productores, satisfechos por la buena campaña, quieren hacer hincapié en que todos los alicantinos deben conocer que en su provincia se cultiva un arroz inmejorable y solicitan mayor visibilidad por parte de las administraciones.   

 

Por último, el presidente de ASAJA Alicante, José Vicente Andreu, afirma que "el proyecto que se está desarrollando en el arrozal de Pego va más allá de una simple experiencia de ensayar nuevas variedades de arroz o recuperar una variedad tradicional; es un gran ejemplo de colaboración y puesta en común  de  objetivos que partiendo de un minifundio fuertemente afectado hace décadas por esa estructura incompatible con las nuevas técnicas de cultivo mecanizadas, están revitalizado un cultivo y una zona a base de imaginación, colaboración y emprendimiento".
Fuente: Asaja Alicante