ASAJA reclama al gobierno medidas para atajar el despoblamiento e impulsar el desarrollo rural sostenible
12 - 09 - 2018El informe, dirigido por ASAJA, pone de manifiesto los problemas que afectan al medio rural, un espacio que ocupa el 85% del territorio, alberga al 20% de la población española, concentra todos los recursos naturales y buena parte del patrimonio histórico y cultural y ubica toda la actividad económica del sector agropecuario, encargado de proporcionar alimentos sanos y de calidad a los ciudadanos y garantizar la gestión sostenible del medio natural.
Las comunidades autónomas que más sufren estos problemas son las del interior de España (Castilla-La Mancha, Castilla y León, Aragón, Extremadura…) donde en amplias zonas del territorio se observa un alarmante descenso de la población y el envejecimiento de la misma. También ocupan un lugar relevante en el informe las carencias de infraestructuras y la falta de equipamientos (redes energéticas y digitales, distribución de agua, etc.) y servicios (sanitarios, educativos y de ocio) así como la ausencia de alternativas laborales para buena parte de la población.
Ante esta situación resulta imprescindible reactivar el medio rural en tres niveles básicos: económico: impulsando políticas de promoción empresarial para reforzar la capacidad económica del medio rural, con especial atención a la creación y desarrollo de industrias agroalimentarias; social: promocionando el empleo de los jóvenes y las mujeres del ámbito rural y fomentando la formación y la innovación y medio-ambiental: priorizando la conservación del entorno natural para mitigar los efectos de la erosión, desertificación o contaminación y fomentando las actividades económicas sostenibles y la producción ecológica.
Un capítulo aparte en este informe merece la digitalización. El acceso a internet es un elemento imprescindible para el desarrollo de nuestro medio rural. Las políticas de desarrollo regional deben contemplar la transformación digital de las empresas rurales como un aspecto esencial para su modernización y adaptación a los mercados. Este aspecto guarda relación con la mejora de la dotación de infraestructuras que permitan atender las necesidades de la población en aspectos esenciales como son comunicaciones, transportes, abastecimiento de electricidad y agua, servicios sanitarios y educativos, tratamiento de residuos, así como ampliar las posibilidades de desarrollo económico y de acceso a las nuevas tecnologías, incluyendo el desarrollo de “smart villages” o comunidades inteligentes.
Por último, debemos mencionar uno de los sectores con mayor potencial de crecimiento y creación de empleo en el medio rural, el turismo. La riqueza de nuestro patrimonio natural y cultural constituyen un valor que puede generar múltiples oportunidades de desarrollo y empleo, eso sí, las políticas de promoción turística deben tener presente una adecuada organización del territorio y evitar los efectos negativos a nivel conservación de recursos y sobre-explotación.