La organización agraria Asaja Córdoba ha destacado la gran preocupación que tienen los agricultores y ganaderos por la situación del campo cordobés, fundamentalmente por los bajos precios de las producciones, y la adversa climatología de este año.

 Los precios de los cítricos, el aceite de oliva, la aceituna de mesa, los cereales, el girasol, las leguminosas, el ovino, son lamentables, por debajo de los costes normales de producción, que dejan la rentabilidad de las explotaciones en una compleja situación.

A ello, hay que añadir la falta de sensibilidad, fundamentalmente de la Comisión Europea y del Ministerio de Agricultura ante este grave problema.

 Ejemplos de esa dejación de funciones son la falta de rigor en los controles de entrada de cítricos de terceros países por parte de la UE, o lo que ha hecho el Ministerio de Hacienda con los módulos para el IRPF que, “con nocturnidad y alevosía, ha esperado a que pasaran las elecciones generales, europeas y locales, para no bajarlos, con lo que se puede afirmar con rotundidad que el Gobierno de España, en vez de ayudar al sector, lo que hace es exprimirlo a impuestos”.

   Otro clamoroso ejemplo es lo que está pasando con el olivar, con unos inadmisibles e ilógicos precios, donde ambas administraciones tampoco están dando respuestas a las necesidades de los olivareros, por lo que la organización agraria no descarta llevar a cabo acciones reivindicativas si no hay soluciones inmediatas y voluntad política de resolverlas. Entre otras cuestiones, el Ministerio de Agricultura debería haber solicitado ya a Bruselas la activación del almacenamiento privado, al estar dándose una “grave distorsión” del mercado, y no lo ha hecho aún.

   Y no podemos olvidar al ovino, una producción ganadera fundamental para mantener muchas zonas rurales y evitar los incendios forestales, que sufre “una dura competencia por la entrada de corderos de terceros países”.

   Por otro lado, están los cultivos herbáceos, tan importantes para la provincia de Córdoba, como son el trigo duro y el blando, el girasol o las leguminosas, con precios a la baja de forma estructural y sin que se activen medidas solicitadas por Asaja hace tiempo, como la obligatoriedad del etiquetado en origen.

   A todo ello, hay que añadir “las cada vez más estrictas normas que nos exigen y que sólo sirven para restar competitividad al campo respecto a nuestros competidores de terceros países”. No es de recibo que “se esté permitiendo entrar en la UE producciones de países que usan productos prohibidos en la UE, y que no tienen los requisitos laborales, legales y medioambientes a los que se obliga a los productores del campo cordobés, español y europeo”. En las últimas semanas “hemos visto un nuevo ejemplo, como es obligación del control horario, de muy difícil aplicación en nuestras explotaciones y que incrementará aún más los costes de gestión”.

   Y, por último, Asaja Córdoba quiere insistir una vez más en la importancia de la unión de los diferentes sectores productivos y la suma de esfuerzos entre ellos, no sólo a efectos reivindicativos, sino, sobre todo, a efectos comerciales, debiéndose evitar la atomización de la oferta, haciendo los esfuerzos necesarios para evitar los protagonismos e ir por el camino de la integración en grupos fuertes con el fin de aglutinar la oferta y ser más competitivos de cara a los mercados.