Thumb
Un año más, la climatología ha modificado unas cosechas que se preveían buenas hasta el mes de abril; la situación de los cultivos hasta ese momento daban esta certeza. Pero en mayo un calor fuerte y fuera de tiempo, un viento mata trigos afectó toda la siembra más tardía; la temprana se salvó ya que el grano estaba avanzado. En un solo día se pudo ver como se pasó de un color de sembrados verde a un color blanco.

Según ha explicado la presidenta de ASAJA Barcelona, Rosa Pruna, “en Cataluña las pérdidas son superiores al 30%, siendo Lleida y Barcelona las demarcaciones más afectadas”. Hay comarcas como los dos Vallés, el Oriental y el Occidental, que rondaban el 50%, Bages el 40%, y las comarcas del Urgell, Anoia y Ripollès, también. Osona y Berguedà un 20%. Toda la siembra tardía ha sido la más perjudicada.

 Pruna ha manifestado que “en resumen se trata de una cosecha irregular, con bajos rendimientos de grano y paja; el calor también ha perjudicado a los cultivos de maíz en toda Europa, ya que se prevé que sean un 10% inferior”.

 Los datos oficiales, respecto al 2014 dan una bajada de producción del orden del 10 al 12%. Lo que pasa es que ya el año 2014 fue un mal año, por lo que tomando la referencia de 2013 comparado con el 2015, la pérdida de producción en trigo fue del 31,12%, en el caso de la cebada, el descenso ha sido del 40,47%, y en la avena del 26,90%.

En la Unión Europea (UE), en países como Alemania, Polonia, Francia, Italia y España, la climatología ha provocado un descenso del 7,5%, unos 296 millones de toneladas. El año pasado fueron 320,5 millones de toneladas, y las sequías muy generalizadas. A nivel de España el fuerte calor y sequía han provocado un descenso de cosecha de un 30%; las más afectadas son Cataluña, Aragón, las dos Castillas y Navarra con 13.822 millones de toneladas, frente a los 18.000 millones de 2014.

Sector ganadero

 Desde ASAJA reivindicamos un año más que, entre administraciones y sector no podemos dejar de lado la difícil situación por la que está pasando el sector agrario, y trabajar por un seguro de explotación por la pérdida de renta.

Por su parte, el sector lechero, ahora que no tenemos cuotas de producción, debería ir mejor, teniendo en cuenta que somos deficitarios; pero la realidad nos dice que tenemos un sector excesivamente castigado. Nos está entrando de fuera mucha leche sin ninguna garantía, ni sin saber su procedencia, "cuando en realidad podría ser leche producida en nuestro país, ya que somos deficitarios en un 40%". Por esta razón, si el tema no se soluciona, ASAJA Barcelona no descarta movilizaciones para denunciar la situación.