El presidente y vocales de la Cámara Agraria Provincial de Palencia presentaron ayer su dimisión de todos los cargos que ostentaban desde las últimas elecciones de diciembre de 2007. De la misma forma los representantes de las Cámaras de León, Salamanca y Valladolid, además de los vocales de la organización agraria en las cámaras donde no gobierna, han presentado hoy su dimisión.

El motivo de la dimisión de ASAJA es el recorte en la partida presupuestaria de la Junta de Castilla y León para estas corporaciones de derecho público, que pasa de los 1,9 millones de euros en el año 2011, a los 700.000 euros previstos en la Ley de Presupuestos de 2012, en trámite parlamentario, para las nueve cámaras agrarias. En Palencia el presupuesto ha pasado de 270.000 a 78.000 euros.

Los representantes de ASAJA entienden que con este presupuesto, y dado que la Cámara tiene limitada por ley la fuente de ingresos, es imposible afrontar los gastos corrientes, por lo que habría que recurrir al recurso que plantea la consejera de Agricultura y del que la organización no quiere ni oír hablar: la venta del patrimonio histórico de los agricultores.

ASAJA ha agotado todas las vías de diálogo con la consejería de Agricultura después de haber mantenido hasta cuatro reuniones al más alto nivel en las que se ha tratado este asunto y considera también que no hay voluntad del PP, con mayoría absoluta en las Cortes, para presentar una enmienda parcial que corrija la partida presupuestaria.

ASAJA espera que la consejería de Agricultura nombre de forma inmediata las juntas gestoras que se harán cargo de las Cámaras que ya no cuentan con presidente hasta la celebración de nuevas elecciones.

La organización agraria exige que se mantengan los servicios que se vienen prestando a las juntas agropecuarias locales de las provincias, que se mantenga la actividad que se desarrollaba, y no permitirá que el patrimonio de todos los agricultores, formado por las oficinas de la sede social de las mismas, se venda para liquidar las instituciones.

ASAJA lamenta que en medio de tanto despilfarro de gasto público y de tantas instituciones de dudosa efectividad, la Junta haya decidido empezar por el campo suprimiendo unas instituciones que están prestando servicios, representan a todos los agricultores, se eligen por un sistema democrático modélico y que tienen un presupuesto de funcionamiento francamente modesto.

Respecto a la Cámara Agraria de Soria, la única con presidente de ASAJA que hoy no dimite,  hay que subrayar que la situación es similar a la del resto, ya que ASAJA-Soria está de acuerdo en que con los recursos y condiciones impuestos por la Consejería no puede ser gestionada correctamente. Igualmente, coinciden con el resto de compañeros de ASAJA en otras provincias en su oposición frontal a despedir personal, hipotecar o vender patrimonio, por lo que en el momento en que no haya dinero para afrontar los gastos, se dirimirá el problema por vía judicial.