Los lobos no paran. Un nuevo ataque se produjo el martes día 29 de Octubre en Campisábalos, con resultado de un ternero de dos meses muerto.

En este caso el ganadero afectado es Pascual Chicharro. Otro ganadero bastante afectado por esta situación fatal que viven los ganaderos de la Sierra Norte de Guadalajara.

Como consecuencia del ataque desparecieron una vaca y su ternero, que el ganadero ha encontrado dos días después a tres kilómetros del lugar habitual donde se  encuentra su ganado. Pascual asegura que “las vacas están muy asustadas y no quieren subir a pastar, están como fieras”. “Yo no tengo porque vivir esto, yo sólo intento vivir de ello y dar de comer a mis hijos”, asegura este ganadero desesperado, quien añade que “llevan al menos cuatro años sin pagarnos nada y no sólo son los lobos, porque los buitres están igual”.

A la desmoralización e impotencia de los ganaderos se suma el enfado por las manifestaciones del Coordinador de los Servicios Periféricos de Agricultura ayer en la reunión de la junta rectora del Parque Natural del Hayedo de la Tejera Negra, donde declaró que si los ganaderos no han cobrado es porque no han querido, ya que han tomado la opción equivocada al no querer suscribir el seguro que les propuso la Administración. Estas manifestaciones inquietan aún más a los ganaderos que no son los culpables, sino las víctimas de esta situación.

Los representantes de los ganaderos en esta Junta manifestaron su desacuerdo con  el Coordinador, ya que los daños del lobo como especie protegida los debe pagar la Administración y así lo hacen el resto de comunidades autónomas afectadas y lo recoge una sentencia del Tribunal Supremo. “Aquí lo único que está en peligro de extinción son los ganaderos, no los lobos.”, manifestaron los ganaderos. Los animales muertos por ataques de lobos en la Sierra ya no se cuentan por decenas sin por centenares y los ganaderos dicen que no están dispuestos a seguir alimentando al lobo.