En relación con las declaraciones de la UGT en las que pone en duda este cumplimiento y daña la imagen de los agricultores y ganaderos

 

En relación con las declaraciones que realizó ayer la UGT sobre “la obligación que tienen los empleadores de dar alojamiento a los temporeros en vendimia”, ARAG-ASAJA reivindica el cumplimiento riguroso que realizan los agricultores y ganaderos de sus deberes, tanto legales, en lo que se refiere al cumplimiento del convenio agropecuario (alojamiento, remuneración y derechos del trabajador), como morales, en lo que concierne a la forma de cumplir estas obligaciones.  

Por alusiones, ARAG-ASAJA manifiesta el importante esfuerzo de formación e información que realiza para que sus asociados conozcan sus obligaciones y todas las que les afectan (llevanzas de libros, de gestión, de uso de fitosanitarios, prevención de riesgos, higiene…) y la “absoluta” concienciación que tienen de todo ello. En el caso concreto del alojamiento, hay que diferenciar además, entre los temporeros contratados, que sí tienen que disponer de un alojamiento ofrecido por el agricultor, y aquellos que no han sido contratados, cuyo alojamiento es responsabilidad de las administraciones públicas.

En este sentido, ARAG-ASAJA  lamenta que todos los temporeros (nacionales y extranjeros) no puedan ser contratados y denuncia los fraudes que se producen en la contratación y los abusos de las mafias, pero exige que se aclaren las obligaciones de cada uno y más rigor en las declaraciones de todas las entidades relacionadas, para lograr un entendimiento que beneficie a todas las partes.

La organización agraria asume las obligaciones de los agricultores y ganaderos y defiende su cumplimiento, así como su deber, como entidad concernida, que participará el próximo 13 de septiembre en la reunión sobre flujos migratorios, que ha convocado la Dirección del Área de Trabajo e Inmigración de la Delegación del Gobierno en La Rioja, para gestionar adecuadamente la llegada de trabajadores para las campaña agrícolas.