Hacienda tenía prevista la fecha para el cambio de tributación por el régimen de estimación objetiva (módulos) para enero de 2019 en la línea que estaba marcada desde la reforma fiscal de 2015, cuando se estableció un sistema transitorio para reducir los límites de facturación de los 125.000 a 75.000 euros y volumen de ingresos de los actuales 250.000 a 150.000. La decisión del Gobierno de posponer una vez más estos cambios la recibimos muy positivamente porque evita una debacle en el sector agrario que mayoritariamente tributa por módulos (el 90% de las explotaciones de nuestro país), no obstante, desde ASAJA GRANADA manifestamos que el sistema no puede estar en permanente cuestionamiento y requerimos el compromiso de que no va a ser eliminado.  

Se trata, precisamente, de un sistema cómodo y sencillo de aplicar, que reduce las obligaciones del titular a una declaración anual de ingresos por la venta de sus productos  (también paga una cantidad fija en concepto de IVA) aplicando una serie de índices de rendimiento neto previamente calculados en relación con el rendimiento esperado,  y que, desde el punto de vista de la lucha contra el fraude, resulta ser más transparente al obligar a declarar directamente los ingresos obtenidos en el ejercicio de la actividad agraria. La reforma del sistema de módulos que se está intentado instaurar conducente, sin duda, hacia su total eliminación, sería un disparo contra la línea de flotación del sector agrario, con una estructura empresarial reducida e índices de rentabilidad muy ajustados, y tendría efectos irreparables para nuestros agricultores y ganaderos.