La organización agraria ASAJA de León ha hecho una estimación de la cosecha de cereal de invierno en la provincia de 301.800 toneladas de grano, lo que representa una caída del 25% respecto a las 400.900 del pasado año. La reducción de cosecha es menor que en otras provincias de Castilla y León debido al peso de la agricultura de regadío en León,  que representa el 28% del total de la superficie cultivada, y que se ha visto menos afectada por la climatología. Mientras que en el secano hay una caída en los rendimientos respecto al pasado año de hasta el 35 por ciento, en el regadío se sitúa entre el 10 y el 15% según variedades y zonas.

Por variedades, ASAJA estima una cosecha de trigo de 207.312 toneladas, de cebada de 60.980, de avena 17.080, de centeno 14.652 y de triticale 1.848 toneladas. La superficie cultivada es prácticamente la misma que la del año 2013, alcanzando las 103.270 hectáreas. Por variedades, 63.000 son de trigo, 21.400 de cebada, 9.850 de avena, 8.140 de centeno y 880 de triticale. Representando el regadío el 28% de la superficie cultivada, va a producir este año 150.500 toneladas de grano, el 50% de toda la cosecha.

No se esperan ya lluvias antes de que el cereal esté listo para la cosecha, ni tendrían por lo general efectos beneficiosos si las hubiera. Las altas temperaturas de hasta 30 grados en algunas horas del día, que está habiendo, pueden reducir todavía más las previsiones al acelerar el secado de la planta y el grano.

Los precios tampoco acompañan