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Los apicultores demandan que se detalle el país de origen de la miel y el porcentaje de mezcla para evitar generar confusión en el consumidor y competencia desleal en precio con el producto local.

 

La Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (ASAGA Canarias) se une al sector apícola del Archipiélago para demandar al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que cumpla el compromiso de introducir las demandas de los apicultores en el nuevo Real Decreto que se está elaborando y, que en estos momentos se encuentra en fase de consulta pública, con el objeto de clarificar el etiquetado.

            El sector apícola solicita que en el etiquetado de las mieles que se comercializan en España se aclare el país de origen de la miel y el porcentaje de mezcla, tal y como sucede en otros países de la Unión Europea como Italia, Polonia y Grecia. La normativa actual, Directiva 2014/63/UE,  permite a los envasadores etiquetar mieles como “mezcla de mieles UE-no UE” sin indicar los países en los que fueron recolectadas ni los porcentajes utilizados de cada una.

            Esta deficiente información, no solo genera confusión en el consumidor sino que crea una competencia desleal con las mieles locales, ya que las producciones foráneas se comercializan a precios más bajos mermando la rentabilidad de los apicultores canarios y poniendo en serio peligro el mantenimiento de esta ancestral actividad.

            En Canarias, una de las formas de distinguir las mieles locales de aquellas que no lo son es a través de alguno de los sellos de calidad como la Denominación de Origen Protegida (DOP), el logo de las Regiones Ultraperiféricas (RUP) o la Denominación de Origen Miel de Tenerife que garantizan, además del origen, la trazabilidad, calidad y seguridad alimentaria en todo momento. De ahí la importancia de que el consumidor se fije bien en el etiquetado para comprobar que aparecen algunos de estos distintivos.